El posicionamiento de Repsol como una compañía multi energética global
con foco en la experiencia cliente se conjuga con un sólido compromiso
con las energías limpias. A su apuesta por la fotovoltaica, el hidrógeno
verde y los biocombustibles, se suma la entrada en nuevos mercados de
renovables, como el estadounidense, y el objetivo de alcanzar las cero
emisiones netas en 2050.

La transición energética de Repsol impulsa su contribución a la electrificación de la movilidad: mediante el despliegue de puntos de recarga por España y Portugal (están previstos un millar para finales de año), la compañía está transformando sus gasolineras en puntos de repostaje multienergético.

Una cartera global de 24 millones de clientes que acceden a una variada
oferta de movilidad compartida (Wible), electricidad y gas (cuya base de usuarios ha crecido un 46% en dos años), lubricantes, estaciones de
servicio y tiendas de conveniencia (Supercor Stop&Go), avalan una
estrategia centrada en el consumidor, al cual Repsol aspira a fidelizar como único proveedor energético.